León Gieco - Cancion para Carito, аккорды песни для гитары
E Bb E
Sentado solo en un banco en la ciudad
F#m
con tu mirada recordando el litoral
A
Tu suerte quiso estar partida
E C#7
mitad verdad, mitad mentira
F#m B7 E
como esperanza de los pobres prometida.
Andando solo, bajo la llovizna gris
fingiendo duro que tu vida fue de aqui
por qué cambiaste un mar de gente,
por donde gobierna la flor
mira que el día nunca regaló el color.
E7 A G#m C#7
Carito, suelta tu pena
F#m B7
se haga diamante tu la grima
Bm7
entre mis cuerdas
E7 A G#m C#7
Carito, suelta tu piedra
F#m B7
para volar como el zorzal
E
en primavera
F#m B7 E
C#7 F#m B7 E
E7 A B7 E
C#7 F#m B7 E
En Buenos Aires los zapatos son modernos
pero no lucen como en la plaza de un pueblo
deja que tu luz chiquitita
hable en secreto a la canción
para que te ilumine un poco más el sol.
Cualquier semilla cuando es planta quiere ver
la misma estrella de aquel atardecer
que la salvó del pico agudo,
refugiandola a lo oscuro
de la gaviota arrasadora de los surcos.
Carito, yo soy tu amigo
me ofrezco árbol
para tu nido
Carito, suelta tu canto
que el abanico en mi acordeón
lo está esperando.
León Gieco - Cancion para Carito, аккорды песни для гитары
E Bb E
Sentado solo en un banco en la ciudad
F#m
con tu mirada recordando el litoral
A
Tu suerte quiso estar partida
E C#7
mitad verdad, mitad mentira
F#m B7 E
como esperanza de los pobres prometida.
Andando solo, bajo la llovizna gris
fingiendo duro que tu vida fue de aqui
por qué cambiaste un mar de gente,
por donde gobierna la flor
mira que el día nunca regaló el color.
E7 A G#m C#7
Carito, suelta tu pena
F#m B7
se haga diamante tu la grima
Bm7
entre mis cuerdas
E7 A G#m C#7
Carito, suelta tu piedra
F#m B7
para volar como el zorzal
E
en primavera
F#m B7 E
C#7 F#m B7 E
E7 A B7 E
C#7 F#m B7 E
En Buenos Aires los zapatos son modernos
pero no lucen como en la plaza de un pueblo
deja que tu luz chiquitita
hable en secreto a la canción
para que te ilumine un poco más el sol.
Cualquier semilla cuando es planta quiere ver
la misma estrella de aquel atardecer
que la salvó del pico agudo,
refugiandola a lo oscuro
de la gaviota arrasadora de los surcos.
Carito, yo soy tu amigo
me ofrezco árbol
para tu nido
Carito, suelta tu canto
que el abanico en mi acordeón
lo está esperando.